El poema
No puedo evitar dejar de meterme en la boca del lobo
lo intento una y otra vez
salgo varias veces
vuelvo a entrar como si fuera llamado
por algo que está al fondo
Algo muerto que me llama
una muerte que me busca
Me atrae y me seduce
y ahí estoy de vuelta para ella
para que me retenga hasta que yo viva de vuelta
y ahí estoy de vuelta para ella
para que me retenga hasta que yo viva de vuelta
Una vez libre vuelvo a entrar
en busca de otra
que me haga sentir el rigor de tener que sobrevivir
que me mantenga alerta
que me haga ser parte suya
y ahí estoy en esa boca
que está por matarme
y en ese momento pego la vuelta
le digo adíos
en busca de otra
que me haga sentir el rigor de tener que sobrevivir
que me mantenga alerta
que me haga ser parte suya
y ahí estoy en esa boca
que está por matarme
y en ese momento pego la vuelta
le digo adíos
No muero
Sigo vivo y festejo
con gran entusiasmo vuelvo a cumplir años
al despertarme vuelvo a entrar
en busca de eso
de ese sentir
de la infatigable desrazón de su olor
de la infatigable belleza de sus negros
y ahí me quedo un segundo contemplando
abrazando sus olores rancios
escuchando sus últimos resoplidos
y cuando va a pagar el precio
estoy yo para poner a tino
y es en mí que recae toda la furia
con gran entusiasmo vuelvo a cumplir años
al despertarme vuelvo a entrar
en busca de eso
de ese sentir
de la infatigable desrazón de su olor
de la infatigable belleza de sus negros
y ahí me quedo un segundo contemplando
abrazando sus olores rancios
escuchando sus últimos resoplidos
y cuando va a pagar el precio
estoy yo para poner a tino
y es en mí que recae toda la furia
Me acometo con dureza
aguanto hasta la noche
amanece y sigo vivo
aguanto hasta la noche
amanece y sigo vivo
Muerto en vida.
Y el momento que realmente estuve vivo
fue un sueño
Uno de esos donde la vida es...
fue un sueño
Uno de esos donde la vida es...